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En México, existe una gran variedad de dulces típicos que varían de una región a otra, muchos de ellos son elaborados artesanalmente y son emblemáticos de la cultura mexicana. Con la llegada de los españoles, la cultura indígena se mezcló con nuevas costumbres, tradiciones y sabores. Muestra de ello es la comida mexicana, la cual es considerada una de las más variadas y ricas del mundo. La elaboración de los dulces tradicionales mexicanos forma parte de esta gran riqueza culinaria.

Alegrías

Las alegrías son el dulce más representativo de México, por las semillas de amaranto provenientes de este país. La receta para la elaboración del dulce de alegría ha pasado de generación en generación durante muchos siglos, hasta llegar a nuestros días sin sufrir modificaciones importantes. Las alegrías se preparan con semillas de amaranto como ingrediente principal, miel y pasitas.

La planta de donde proceden las semillas, el amaranto, es originaria de México y desde tiempos prehispánicos, además de formar parte de la dieta de los indígenas, se usó como moneda de cambio y con fines ceremoniales, para lo que realizaban figuras de amaranto y miel para ofrecerlas a los dioses.

Palanquetas de cacahuate

Las palanquetas de cacahuate son otro dulce típico y muy famoso en México. Este dulce se prepara con cacahuates en trozos, azúcar, agua, glucosa líquida, margarina y grasa o aceite vegetal es muy rico.1

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Pepitorias

Este dulce se prepara formando una miel con piloncillo con la cual se pegan las semillas de pepita en unas obleas de colores.

Dulce de calabaza

Este delicioso postre se prepara con calabaza de castilla, agua, azúcar, miel, piloncillo y canela.

Cocadas

La cocada es un dulce típico que sin duda alguna lleva consigo el sabor de México, se distingue por el especial sabor que adquiere al ser horneado y el característico color amarillo de este delicioso dulce. Se prepara con coco rallado, azúcar y yemas de huevo, que al ser horneadas como paso final, adquieren su característico sabor y crujiente textura.

Para preparar cocadas se necesitan ingredientes como coco rallado, azúcar morena, una copa pequeña de jerez, leche, yemas de huevo, almendras frescas.

Higos

Los higos en dulce son otra tradición en golosinas mexicanas. Su sabor característico se debe al caramelo que surge de la cocción de éstos con azúcar, con un sabor dulce pero semiamargo.

Merengues

Preparar un buen merengue es un arte en la cocina mexicana. Los merengues son dulces que se preparan con claras de huevo y azúcar. Son dulces muy típicos en México y representan parte de la cultura popular de país, ya que, al caer la tarde, pasan por la calle los vendedores de merengues con sus canastas por toda la región. Los merengues se preparan con claras de huevo, azúcar, maizena y esencia de vainilla.

Dulces de alfeñique

El término alfeñique es de origen árabe y se refiere a una pasta de azúcar cocida que combinada con la almendra y el cacahuate crea un delicioso dulce. Es utilizado principalmente durante la celebración de día de muertos.

Camote

Los camotes, así como otros grandes representantes de los dulces típicos poblanos, tienen su origen en un convento o, al menos es lo que se cuenta popularmente.

La palabra “camote” viene del náhuatl “camohtli”, que significa «raíz comestible». Es un tubérculo parecido a una papa pero con sabor ligeramente dulce; se estima que desde hace más de 8 000 años se cultiva en el continente americano. Existen cientos de variedades del camote. La raíz comestible es de forma irregular, larga y bulbosa. La cáscara, lisa, va desde un color café claro, pasando por rojizo y llega a ser hasta morada. La pulpa puede ser de color crema, amarilla, anaranjada o morada.

El dulce de camote es característico del estado de Puebla y se prepara con azúcar, esencia de limón o de naranja y un poco de agua hasta que se haga una pasta o puré.

Su presentación es diferente a muchos dulces, ya que a la pasta una vez que la hicieron tubo se envuelve en un papel encerado, posteriormente se ponen en cajitas pequeñas para su venta. Al momento de su exhibición podemos ver las cajitas multicolores, llenas de camotes de diferentes sabores, listas para su degustación.

Jamoncillo

 Preparado con el dulce de leche, semillas de calabaza y piñón, los podemos encontrar en barras de colores rosa o blanco. El más natural es de Axochiapan, Morelos.

Macarrones

 Los macarrones están elaborados de leche, son suaves, de forma alargada y color café claro.

Muéganos

Físicamente se aprecia como varios trozos de harina pegados con el dulce. Inclusive, por esas características físicas el nombre muégano también se utiliza con una connotación social para denominar a un conglomerado de dos o más personas unidos por un vínculo muy fuerte. Los muéganos son un rico dulce de Huamantla, Tlaxcala, muy fácil de elaborar.

Sobre la mesa se forma un círculo con la harina, se añaden el agua, la manteca, el anís y la sal y se revuelve todo muy bien hasta que quede una masa muy fina; con ésta se van haciendo unas bolitas que luego se aplastan con las manos para darles forma rectangular de aproximadamente 5×10 cm y se meten al horno precalentado a 150ºC, de 25 a 30 minutos o hasta que estén cocidas.

La miel: Se pone a hervir el agua con el piloncillo y la canela, moviendo hasta que la miel así formada tome punto de hebra, entonces se retira del fuego y se deja enfriar un poco. Con esta miel se bañan los muéganos ya cocidos, que luego se cubren con las obleas cortadas en pedazos o, si lo prefiere, en rectángulos del mismo tamaño que los muéganos.

Los muéganos de Tlaxcala se hacen de la misma manera, pero son más pequeños y se colocan varios sobre una oblea, bañándolos con la miel, pero sin cubrirlos con otra oblea.

A pesar que pocas personas se aventuran a precisar una fecha exacta de su origen, se cree que fue en 1938 cuando el señor Aurelio Martínez Calva inició la preparación de este dulce en tierras huamantlenses. Otros señalan que este dulce se originó en Texmelucan por 1905 cuando Doña Flora Álvarez, en su afán de crear un nuevo tipo de pan para poder venderlo, ocurrió en realizar lo que hoy conocemos como muégano Al igual que la mayoría de los dulces típicos poblanos, los muéganos surgen de una combinación entre la comida indígena y la española.En sus inicios, los muéganos se acompañaban de nieve de limón, misma que se vendía en los puestos del centro de Huamantla.

Tortitas de Santa Clara

Uno de los dulces más reconocidos de Puebla, creados en el Convento de Santa Clara por las religiosas durante la Colonia. La historia cuenta que una de las monjas buscaba nuevas recetas con el dulce de pepita y se le ocurrió combinarlo con una galleta y fue así como nació tan delicioso manjar.

Borrachitos a la carololopiña

Dulces hechos de harina y espolvoreados con azúcar, los hay de sabores como fresa, piña, rompope, etc. Su nombre se debe a que en su preparación se añade licor y al igual que las tortitas, su invención, se atribuye a las monjas de Santa Clara y Santa Rosa.

Gallo

Se trata de un dulce de pepita de calabaza en forma de un gallito finamente decorado. Esta delicia de la repostería mexicana tiene sus orígenes en el siglo XVI y que salió de las cocinas conventuales de la Ciudad de México. El dulce, heredero del mazapán almendrado español, se comenzó a elaborar con las semillas de calabaza por el costo tan alto que suponía importar las almendras desde España.

Ollitas de tamarindo

La presentación de este dulce varia con respecto al estado de la república en el cual se encuentre, se le puede hallar en forma de una pequeña esfera, sobre una cuchara, envuelta como un pequeño tamalito o de la forma más tradicional en una ollita de barro. Esta última se ha modernizado para poderla comercializar por medio de pequeños vasitos de plástico.

Este dulce está hecho a base de pulpa natural de tamarindo, si se quiere dulce se le agrega azúcar y si se quiere salado se le agrega sal, chile en polvo y limón.