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La Disfunción Eréctil se define como la incapacidad sostenida para conseguir y mantener una erección suficiente para permitir una relación sexual satisfactoria. Por tanto el primer diagnóstico lo da el propio paciente cuando se alarma al no conseguir rigidez suficiente para penetrar

Es un proceso muy común que afecta a 152 millones de personas en todo el mundo.

En occidente se presentan 25-30 nuevos casos por 1000 habitantes y año, y sólo en España se calcula que existen entre 1,5 y 2 millones de varones con disfunción eréctil. Sin embargo sólo el 16,5 % de los afectados consultaba al médico por este problema (Estudio EDEM de 1999).

En este estudio EDEM (que aunque es de 1999 sigue teniendo prevalencia)  se encontraron los siguientes porcentajes de DE por franjas de edad:

25-39 años ….. 8,6%
40-49 años ….. 13,7%
50-59 años ….. 24,5%
60-70 años ….. 49%

Encontramos pues disfunción eréctil en todas las edades. En los jóvenes la causa más frecuente es la psicogénica. La franja de edad de mayor incidencia de causa orgánica se encuentra en hombres entre 50 y 70 años (75%).

Síntoma centinela – Órgano diana

Sucede en muchas ocasiones que gracias a que el paciente consulta por una alteración de su erección encontramos en el estudio alteraciones de su tensión arterial, problemas coronarios, enfermedades del riñón o del hígado, o desde una simple anemia hasta tumores. Decimos así que la Disfunción Eréctil se comporta como un síntoma de aviso de otras enfermedades, o que el pene es un “órgano diana”

Diagnóstico

El proceso diagnóstico conlleva una serie de pasos para dilucidar si el problema es orgánico, de causa psicológica o mixta. Requiere:

  • Exploración del paciente y de su pene
  • Análisis general y hormonal
  • Realización de tests de evaluación
  • Registro de Erección nocturna (RigiScan)
  • Estudio de la circulación del pene (Eco Doppler),

Dentro de las causas orgánicas,  se deben descartar las causas hormonales, la presencia de una enfermedad sistémica, los problemas neurológicos y la toxicidad de ciertos medicamentos.

Afectación vascular

Es la causa principal de la Disfunción Eréctil. Los procesos vasculares que mayoritariamente desencadenan DE son:

  • Enfermedad vascular primaria
  • Lesiones arteriales accidentales
  • Arteriosclerosis y elevaciones del colesterol (hiperlipemias): Producen lesiones arteriales obstructivas a nivel de arterias del pene.
  • Diabetes mellitus: es un factor de riesgo vascular que produce alteraciones de los mecanismos de aporte sanguíneo al pene durante la erección.
  • Hipertensión arterial: Produce un descenso del porcentaje de fibras musculares lisas y un aumento de fibrosis a nivel del pene
  • Tabaquismo

Afectación neurológica

  • Enfermedades neurológicas
  • Neurotóxicos
  • Accidentes
  • Cirugías radicales (tratamiento quirúrgico del cáncer de próstata)

Tratamientos

Ante un caso de enfermedad sistémica, el manejo de esa enfermedad y su mejoría podrán ayudar al paciente a mejorar su erección.

El abandono de los tóxicos (el tabaco, y la heroína principalmente, pero en general todos) mejora siempre la erección deteriorada.

Claro está que si el paciente tiene un problema hormonal, la hormonoterapia es lo indicado

Ante un caso de causa psicológica, la psicoterapia será de ayuda

Desde los años 80 se venía utilizando  la inyección de papaverina en el pene para producir erección, y en los años 90 la Prostaglandina E1 desplazó a la Papaverina al presentar muchas menos complicaciones. Se comercializa desde 1994 como Alprostadilo (Caverject) y actualmente existe una presentación en forma de supositorio uretral (Muse)

Desde 1998 en que aparecen los inhibidores de la FDE-5, comienzan a darse grandes pasos en el tratamiento con medicamentos orales de la Disfunción Eréctil. La introducción del Sildenafilo (Viagra) y posteriormente Tadalafilo (Cialis) y  Vardenafilo (Levitra) y en los últimos tiempos el Avanafilo, Udenafilo y Mirodenafilo, han supuesto un importantísimo avance en el tratamiento de esta enfermedad. Todos estos fármacos son de la misma familia, Inhibidores de Fosfodiesterasa 5 y su efecto consiste en conseguir que el mediador químico de la erección, que es el Óxido Nítrico, actúe en más cantidad y durante más tiempo. Se diferencian en su rapidez de acción, en duración en el organismo, y  en la cantidad necesaria para que hagan efecto.

La tasa global de respuesta a los inhibidores de FDE5 es del 65 – 70 por ciento según los autores.

Además de la ausencia de respuesta, o de respuesta no satisfactoria, los Inhibidores pueden causar efectos secundarios:

  • Taquicardia
  • Alteración de la tensión arterial
  • Dolor de cabeza
  • Congestión nasal, o facial u ocular
  • Molestias gástricas
  • Mialgias (Dolores musculares)

Y son incompatibles con los medicamentos que dilatan las arterias coronarias (Nitratos y Nitritos), y con algunos medicamentos para la Hipertensión y con los antiretrovirales (Tratamiento del SIDA).

Cuando los tratamientos fracasan o no se toleran, nos queda la cirugía (Implante de prótesis) como solución. Es una buena y definitiva alternativa para aquél varón que no responde o que no puede tomar los medicamentos existentes.

¿Qué aportan las ondas de choque?

Las ondas de choque (de alta intensidad) se usan desde los años 80 del siglo pasado en el tratamiento de los cálculos de las vías urinarias (LITOTRICIA EXTRACORPÓREA POR ONDAS DE CHOQUE).

Las ondas de choque de baja intensidad ya venían demostrando una potente efectividad ANTIFIBRÓTICA, siendo utilizados en la Fisioterapia Médica para tratamiento de lesiones articulares y degeneraciones fibrosas de ligamentos con gran éxito.

Posteriormente se han demostrado mejorías en la vascularización del músculo cardiaco, primero en animales de experimentación y después en humanos. Este efecto de las ondas de choque de baja intensidad se denomina NEOANGIOGÉNESIS, es decir la aparición de nueva circulación tras destruir el tejido fibroso.

Ondas de choque de baja intensidad en disfunción eréctil

La mayor parte de los problemas de funcionamiento de los mecanismos de la erección son debidos por una parte al déficit circulatorio y por otra a la esclerosis de los pequeños vasos sanguíneos, así como  a una fibrosis progresiva de los cuerpos cavernosos.

Esta fibrosis – esclerosis y este fallo circulatorio se produce tanto en la diabetes, como en la Hipertensión Arterial, como en la Dislipemia por colesterol o en las otras Arterioesclerosis. También en enfermedades de origen desconocido como la Fibrosis de Cuerpos Cavernosos o la Enfermedad de La Peyronie.

Por eso, la aplicación de ondas de choque de baja intensidad va a aportar una mejoría significativa, al luchar en contra de la fibrosis y de la esclerosis, y al producir una nueva vascularización.

El tratamiento va a producir sus efectos de una forma progresiva en el tiempo, observando las mejorías entre 1 y 3 meses de la aplicación de las Ondas de Choque. Este tratamiento no excluye para nada el uso de medicamentos orales para mejorar la erección. Se puede aplicar mientras el paciente sigue tomando su tratamiento oral. Lo que se pretende conseguir es que el paciente o bien deje de necesitarlo, o que precise menor dosis o tomarlo más espaciadamente. En otros casos, pacientes no respondedores a estos medicamentos consiguen poder responder a ellos, alejándose así de la necesidad de una intervención.

La aplicación del tratamiento es indolora y no se conocen efectos secundarios en relación con la administración de terapia con Ondas de Choque de baja Intensidad.