¿Qué es un colchón de agua? Un colchón de agua, cama de agua o colchón de flotación es un colchón o cama preparado para ir relleno de agua. Hay informes de camas de este tipo ya en el siglo XIX utilizadas para terapias médicas. El diseño actual fue patentada en 1971, y fue muy utilizada en Estados Unidos entre los 80 y los 90, aunque en Europa nunca ha llegado a ser muy utilizada.
Fabricación y tipos de colchones de agua
Podemos encontrar dos tipos principales de camas de agua, las de lados duros (hard-side) de lados blandos (soft-side).
Las cama de agua de lados rígidos, duros o también llamados colchones de agua, constan de un colchón que contiene el agua que a su vez está dentro de un marco rectangular de madera que está sobre una cubierta de madera contrachapada que se asienta sobre una plataforma. Además entre colchón y bastidor suele haber una funda de seguridad por si hubiese pérdida de agua.
El colchón de agua de lados blandos, suaves o llamadas camas de agua, es un colchón que contiene agua que va dentro de un continente de espuma robusto y estos a su vez dentro de una funda con cremallera. Parecen camas convencionales y se adaptan a los muebles de dormitorios.
Hay un tercer tipo aunque no está considerado como cama de agua, el tubo de colchón de agua. Son una serie de tubos rellenos de agua que se sitúan sobre un colchón de espuma. Se puede usar sobre cualquier cama.
Los colchones de agua antiguos y los actuales de bajo coste (colchones baratos) tienen una única cámara de agua. Cuando se altera la masa de agua en estos colchones, se puede sentir bastante el movimiento del agua y necesitan un tiempo para estabilizarse. Los modelos actuales utilizan diferentes métodos para evitar ese ‘efecto onda’, cámaras de agua interconectadas o mezcla de cámaras de aire y agua.
Normalmente las camas de agua se calientan utilizando un termostato para controlar la temperatura, aunque lo más habitual es mantenerla a unos 30 grados, cercana a la temperatura de la piel.
Para su fabricación se suele utilizar el PVC o materiales parecidos, por lo que pueden ser reparados con cualquier kit de reparación de vinilo.
Nosotros al referirnos a camas de agua lo haremos a las softside y los hardside serán los colchones de agua.
Historia
Se sabe de las primeras camas rellenas de agua hace más de 3600 años por los persas, los cuales utilizaban pieles de cabra llenas de agua. Se especula si fue utilizada para enfermos y ancianos o de camas diseñadas para la realeza.
El colchón de agua se introdujo en el mundo occidental en el siglo XIX, cuando fue utilizado por primera con fines terapéuticos. En 1873, Sir James Paget en el Hospital de San Bartolomé presentó una cama de agua diseñado por Neil Arnott como tratamiento y prevención de úlceras por presión (escaras de decúbito); una condición que era bastante común en esta época. Paget descubrió que las camas de agua distribuyen la presión del colchón uniformemente sobre el cuerpo. Desafortunadamente, esta invención carecía de la capacidad de regular la temperatura del agua.
El Dr. William Hooper de Portshmouth (Inglaterra), también vio beneficios medicinales en los colchones de agua, sobre todo para pacientes de artritis y reumatismo, y patentó su sistema en 1883. También fracasó por no poder regular la temperatura o contener el agua sin pérdidas.
En 1895 los almacenes Harrods vendieron algunas camas de agua, las cuales tenían la apariencia de grandes bolsas de agua caliente, aunque tampoco tuvieron éxito al no haber materiales adecuados para su fabricación.
No fue hasta la invención del vinilo en la década de 1960 que los colchones de agua volviesen a tener popularidad.
Actualmente el colchón de agua y camas de agua vuelven a tener algo más de popularidad, aunque como siempre son más utilizadas en Estados Unidos que el resto del mundo. Hay una variedad enorme de diseños, mejoras en el control de la temperatura y las ondas, además de otras opciones como soportes lumbares. Además, las camas híbridas o colchones de agua se están volviendo más populares al poder utilizar somieres normales y parecer colchones de toda la vida, con la ventaja de las camas de agua.
¿Quién inventó el colchón de agua?
Se considera a Charles Prior Hall el inventor de la cama de agua actual. La creó en 1968 mientras era estudiante de diseño en la universidad del estado de San Francisco en California.
Originalmente trató de crear una silla innovadora. Su primer prototipo era una bolsa de vinilo relleno de 136 kilos de almidón de maíz, pero resultaba algo incómoda. Su siguiente intento fue rellenarla de gelatina, pero se descomponía con el tiempo. Finalmente abandonó la idea de la silla y fue cuando perfeccionó la cama de agua.
Consiguió la patente de su invento en 1971, que se llamó ‘the pleasure pit’. Fundó una compañía llamada Innerspace Environments, dedicada a la fabricación y venta de camas de agua que se convirtió en el líder en el sector en Estados Unidos.
Ventajas y desventajas de las camas de agua
Las ventajas y desventajas aquí detalladas son respecto a las camas tradicionales más típicas.
Ventajas
- Confort. Tienen la habilidad de producir una sensación mayor de relax y reduce los cambios de posición durante la noche. Los colchones firmes tienden a crear puntos de presión a lo largo de la columna vertebral y las articulaciones. En las camas de agua al repartirse el preso de manera más uniforme no se producen esos puntos de presión, permitiendo un mejor descanso. Es una de las razones por las que se ha utilizado en diferentes épocas de modo terapéutico para evitar escaras (úlceras por presión) y dolores de espalda.
- Higiene. Los organismos microscópicos no pueden vivir en el interior del colchón. La superficie de la cama de agua se puede limpiar rápidamente con un paño. Esto hace que la acumulación de células muertas de la piel sea menor. Este entorno más limpio es ideal para personas con alergias o con asma.
También la funda del colchón se puede limpiar con facilidad. - Temperatura. Tienen la capacidad de regular la temperatura al gusto del usuario, lo que da la sensación de estar flotando en una cálida corriente de agua. Además para los deportistas puede ser una gran opción, ya que al poder dar una buena temperatura al colchón ayuda a la relajación muscular.
Desventajas
- Montaje. No es tan sencillo como llegar a la casa, colocar el somier y dejar el colchón encima. Tampoco es muy complicado, pero hay que llenar el colchón con agua, y prepararlo todo. Dependiendo del tamaño del colchón o cama y la presión del agua en la casa puede llevar de una hora y media a dos.
- Transporte. En caso de mudanza también es algo más complicado. Antes de mover el colchón hay que vaciarlo completamente, y una vez en su sitio volver a llenar.
- Mantenimiento. Prácticamente no tienen mantenimiento, pero cada seis meses tenemos que incorporar un alguicida para evitar la aparición algas o bacterias.
- Gasto de electricidad. Dependiendo del tamaño, calidad y temperatura, tenemos que tener en cuenta que utilizan electricidad para el control de la temperatura.
Cómo llenar un colchón de agua
Sin complicaciones, tan sencillo como conectar una manguera al grifo y usar agua del grifo directamente. Eso sí, para el montaje es mejor seguir las indicaciones del fabricante.