Los vasos sanguíneos, ya sean arterias, venas o linfáticos pueden sangrar, taparse y formar coágulos entre otras cosas. Las enfermedades que afectan estos vasos son muchísimas, razón por la cual se han creado distintas especialidades médicas y quirúrgicas. Los neurocirujanos intervienen los vasos dentro del cráneo.
Los cardiólogos y cardiocirujanos o cirujanos cardiotorácicos se enfocan en los problemas que afectan al corazón y las arterias que están próximas a este (p. ej. aorta ascendente, arterias y venas pulmonares) y los pulmones (en algunos casos).
Los Angiólogos Cirujanos Vasculares (mal llamados Vascular Periférico) contamos con los conocimientos y habilidades necesarias para tratar el resto de los vasos sanguíneos, desde el cuello hasta los pies, pasando por los brazos, el tórax, el abdomen y las piernas; ya sea con medicamentos y/o cirugía. También utilizamos técnicas de mínima invasión llamada Terapia Endovascular.
Las enfermedades que tratamos con más frecuencia son:
- Arteriosclerosis. Es consecuencia del depósito de calcio y colesterol en las arterias. Estas últimas se vuelven rígidas y estrechas ocasionando que el paso de la sangre sea lento o se detenga. Dependiendo del sitio que afecte recibe el nombre de oclusión o enfermedad arterial periférica (brazos y piernas), enfermedad aórtica, renal, etc. La complicación más grave es la amputación y pérdida de tejido..
- Embolias periféricas. Se dan cuando coágulos o fragmentos de tejido obstruyen de manera súbita el paso de la sangre dentro de una arteria, lo que se traduce en isquemia o “falta de circulación” en las partes del cuerpo que se encuentran más allá del sitio del bloqueo. Si no se atienden rápidamente pueden terminar en amputaciones e incluso la muerte.
- Embolia o infarto cerebral como consecuencia de la aterosclerosis de las arterias carótidas, localizadas una a cada lado del cuello y que llevan la mayor parte de la sangre hacia el cerebro. Se conoce como enfermedad carotídea
- Trombosis venosa profunda (TVP) y tromboembolia pulmonar (TEP). La primera se da por la formación de coágulos principalmente en las venas de las piernas y la segunda cuando fragmentos de estos coágulos viajan y ocluyen la circulación pulmonar. Es casi imposible que uno de estos coágulos llegue al cerebro (como mucha gente cree) pues para que esto suceda, el corazón debe tener un orificio en una de sus paredes que permita el paso del trombo de la circulación pulmonar a la sistémica y de ahí a la circulación cerebral (lo cual es muy raro). Este tipo de embolismo se llama: embolismo paradójico.
- Enfermedades de los vasos linfáticos, como consecuencia de celulitis o erisipela, cirugía, radiación, obstrucción o problemas congénitos. Su inflamación se denomina linfangitis.
- Várices, úlceras varicosas y problemas venosos estéticos.
- Pie diabético. A diferencia de muchos otros “especialistas”, el pie diabético lo estudiamos y tratamos desde un punto de vista amplio, enfocados a la causa que le dio origen y no solo a la herida. Usualmente se debe a alteraciones de sensibilidad, circulación y deformidades del pie.
- Colocación de catéteres, creación de fístulas para hemodiálisis.
- Angiografías arteriales y venosas (cateterismos).
- Terapia endovascular en arterias y venas.
- Salvamento de extremidades.